Hoy os traemos imágenes de las primeras polladas de perdiz roja en el territorio. Captadas por el el joven fotógrafo local Rafael Laín en uno de los observatorios que mantiene la asociación Amigos de L’Avaiol, la pollada era de 14 miembros, algo nada habitual. «La madre estaba muy pendiente de ellos y avanzaban a la charca con mucha cautela, una vez cerca del agua estuvieron bebiendo agua y picoteando todos los granos de comida que encontraban alrededor de esta. Todos los pollos seguían muy juntos a la madre y repetían todos sus movimientos aunque había alguno que se quedaba atrás fruto del despiste, pero rápidamente volvía con el resto de ellos», nos cuenta Rafael.

La perdiz roja es uno de los más característicos habitantes de nuestros montes, y uno de los principales pilares de la cadena alimenticia. Por eso mismo, por ser tal vez el animal con más depredadores del Paisaje Protegido (especialmente tras el declive del conejo) es muy inusual ver una pollada tan numerosa y es realmente difícil sacar a tantos pollos adelante.