El buscador de chicas más importante de Europa permite escribir reseñas sobre el servicio de una trabajadora sexual tras un encuentro. Si bien una mayoría de usuarios ya escriben habitualmente comentarios para valorar un producto o servicio, en este caso confluyen varios factores que hacen complicado saber qué se debe valorar en la reseña y qué es apropiado o no.
Uno de los aspectos más criticados por las trabajadoras sexuales sobre los foros es que no se respetan ciertos mínimos a la hora de opinar. En los foros tiene lugar una conversación anónima entre diferentes participantes en la que parece tener cabida cualquier tipo de comentario. La perspectiva se pierde fácilmente en las conversaciones que se mantienen en los foros y se olvida el perjuicio que puede ocasionar a las trabajadoras sexuales. Las valoraciones sobre el físico, el servicio u otras cuestiones más personales, tienen incidencia sobre los potenciales clientes y, sobre todo, sobre la persona.
En el caso de las opiniones, la conversación no existe. Es decir, no hay confrontación o aceptación entre los usuarios, la reseña es una opinión personal, no influenciada por nadie al ser anónima y totalmente independiente. Es decir, la única motivación posible resulta valorar positiva o negativamente el encuentro con la escort, por lo que la práctica totalidad de los comentarios se ajustan al encuentro y no a otras cuestiones.
Las escorts han aceptado positivamente la llegada de las opiniones online porque son objetivos y centrados en aspectos que aportan valor a otros usuarios y a sí mismas. Precisamente es donde radica el valor de las reseñas, en que los potenciales clientes puedan consultar la profesionalidad de las chicas, la actitud o implicación, el trato, el nivel de los servicios o incluso cuestiones sobre el físico desde una perspectiva de respeto.
Las trabajadoras sexuales destacan que, desde la llegada de las opiniones online a su actividad, ha aumentado el número de clientes que buscan a chicas serias y profesionales y ha disminuido el trabajo para aquellas que ofrecen lo contrario o que no trabajan de manera independiente, porque ahora los usuarios tienen la posibilidad de denunciar situaciones ilegales y dar la oportunidad a potenciales clientes de evitar alimentar el negocio de la explotación.