Una vez que se ha recibido el informe técnico de “Revisión y evaluación de riesgo del arbolado sito en la plaça de Baix” por parte de la empresa Baobab Viveros, que concluye que el riesgo actual es alto y obliga a una intervención de urgencia alta, el Ayuntamiento ha decidido llevar a cabo una poda severa de reducción de copas y eliminación total de ramaje para reducir el riesgo de caída de ramas y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Ramón Poveda, alcalde en funciones durante esta última semana de agosto, ha insistido en que “en estos momentos lo más importante es la seguridad de las personas y el informe técnico nos dice que el riesgo actual es alto, por lo que hemos decidido poner en marcha la actuación más idónea para reducir al 100% el riesgo para nuestros vecinos”. En ese sentido, ha recordado que en el último mes se han “desplomado dos ramas, afortunadamente sin tener que lamentar daños personales ni materiales”. Además, ha explicado que el informe técnico recoge que hay varias ramas en las mismas condiciones que las que se han roto hace unos días e incluso, según recoge el informe “durante la revisión de los árboles para el estudio se detectó una rama de gran longitud muy agrietada y en proceso de fractura, que fue cortada en ese mismo momento para mitigar el riesgo que suponía. La misma evaluación de riesgo en la plaza si hubiese contando con la presencia de esa rama cambiaría, ya que supondría un riesgo inminente de fallo. En este caso, el nivel de riesgo hubiese sido extremo”.
El estudio técnico, que también tiene en cuenta el posible valor patrimonial del arbolado, concluye, en referencia a los olmos de la plaça de Baix, que “se trata de ejemplares para nada excepcionales, singulares o monumentales… y no se trata de ningún patrimonio arbóreo excepcional. Simplemente basta comparar el valor de estos árboles con el de cualquier olivo u otro árbol que se puede conseguir en un tamaño grande a precio de mercado”.
También recoge que “todos los árboles de la plaza están lejos de poder ser considerados como monumentales tanto por edad (fueron plantados entre 1982 y 1985) como por tamaño (el más alto mide escasos 14,5 m y el más grueso tiene 162 cm de perímetro de tronco)».
Sustitución de arbolado
Una vez llevada a cabo esta primera actuación de urgencia, el Ayuntamiento de Petrer llevará a cabo la sustitución de los olmos actuales por otro tipo de árbol, previsiblemente moreras, para que, en caso de que en un futuro se lleve a cabo una remodelación de la plaza, el trasplante de dichos árboles se haga con las máximas garantías de éxito.
Esta decisión también se rige por el informe técnico, donde se especifica que la nueva plantación debe hacerse “con ejemplares que puedan ser manejados desde el principio más racionalmente, y cuyo comportamiento no dependa de un legado de prácticas inadecuadas durante decenios”. El objetivo es que la plaza central del municipio tenga árboles mejores, más sanos y seguros.