Miro
con
OJOS
cansado
la
INMENSIDAD
del
FUTURO
y veo
MISERIA
en
PUPILAS
NEGRAS
y
carne
putrefacta
de
MUERTOS
deambulando
con
máscaras
de
CUERVOS
en el
ROSTRO.
AMANTES
desangrándose
en estaciones
de NIEVE
y hojas
tardías
como
los
SUEÑOS
que
perdieron
al mentirse
piadosamente
frente
a las
despedidas
de las vías.
BUITRES
danzan
con traje
de seda
y corbata
mientras
ríen
afilando
garras
para
cercenar
cabezas
y ofrecerlas
ante
el altar
de un
DIOS
que
se alimenta
de vísceras
sin ALMA.
Los
árboles
esconden
en sus
cortezas
las
lágrimas
de caídos
sin
NOMBRES
y las
rocas
gélidas
e inmóviles,
puestas
en círculo
tras
el ritual
chamánico,
son
embalsamadas
por el silencio
y la brea
de la aurora.
Hermoso
paisaje
se levanta
ante
mi
y lloro
porque
jamás
miento
al crear
escenarios
como
este
CEMENTERIO
de tinta
y líquido
amniótico
que porto
en mi cráneo.
Nunca
me superará
de nuevo
mi EGO
en el personaje
que forjé
para la supervivencia
de una
especie
extinguida.
¡POETA
hasta
que MUERA!