Cuando Valencia y su órbita metropolitana se apresta a celebrar los días grandes de Fallas, en Elda, a 130 km de aquel entorno, la Junta Central de Fallas se afana en dar a conocer, por tercer año, una ambiciosa propuesta tendente a promover la fiesta, no solo entre los propios ciudadanos, sino que, ahondando más en la intención, ponen en pie el programa “Fallas en el Cole” dirigido a los alumnos de educación infantil y primaria de los colegios eldenses.
Durante el fin de semana del 14 y 15 de marzo tenía lugar en Elda, lo que podríamos calificar como paso del Ecuador festero, recordando a la población que estamos a falta de seis meses, para volver a celebrar las fallas en Elda. Para ello los responsables de Junta Central han desarrollado un programa de trabajo, a través de la comision formada con este fin, que les ha ocupado desde el pasado mes de noviembre de 2014.
Gran parte de este trabajo se ha venido realizando en siete de los colegios de la ciudad, en los cuales los maestros han trabajado junto a los alumnos en la propuesta titulada “Encuentados en el jardín”. La idea parte de crear una campaña de animación lectora destinada a los centros escolares, elaborada desde Junta Central de Fallas, con la intención de que, el tema central de ésta se vea plasmado en el monumento fallero de características infantiles, construido entre un artista fallero y los alumnos participantes. En esta tercera edición, el tema propuesto, la naturaleza y el cuidado del medio ambiente, partía de la lectura de dos cuentos ilustrados, obra de la autora ilicitana Sonia Sánchez Torres, quien durante varias jornadas visitó los centros escolares hablando con los alumnos de los relatos referidos. Tras la lectura y las visitas, los niños han venido construyendo los ninots para las diferentes escenas de la falla, así como la crítica que les acompaña, repartiéndose este trabajo entre los distintos cursos.
Llegados a este punto es cuando la fiesta cobra vida y sale a la calle. El sábado 14 de marzo El Alminar, sede de Junta Central, abría sus puertas para acoger la visita de los participantes y sus trabajos, que quedarían expuestos en una improvisada galería artística. Los niños eran obsequiados con un pañuelo fallero para llevar anudado en el cuello durante estos días. Mientras tanto, las comisiones se afanaban en preparar el almuerzo, en contra de la climatología adversa y la fuerte lluvia caída durante las primeras horas de la mañana. Gachamigas y parrilladas se cocinaban sobre los trébedes y las hogueras, al mismo tiempo que los niños asistían en el salón de actos a una sesión de cuentos narrados por la autora Sonia Sánchez. Después vendría el momento mágico de plantar la falla. Los niños, acompañados por los mayores, situaban cada escena en su lugar, colocaban las críticas en el sitio adecuado y al acabar se celebraba con una globotá de 2500 globos.
Ya por la tarde, el sábado tenía lugar un desfile por las calles del centro de la ciudad, encabezado por los residentes del centro COCEMFE de Petrer, quienes por segundo año participaban en el pasacalle. Tras ellos desfilaban las distintas comisiones falleras eldenses acompañadas por sus cargos representativos y como cierre de esta marcha, las Falleras Mayores de Elda acompañadas por sus damas de honor y autoridades festeras y políticas.
La mañana del Domingo 15 de marzo, contraria totalmente al día anterior, en lo que a climatología se refiere, albergaba desde las 12:00 los talleres y juegos preparados por los monitores, para que los niños y niñas conozcan y disfruten mejor la fiesta. Supuso una mañana de convivencia, en la que muchas personas quisieron disfrutar de unos momentos en familia. Mientras los niños participaban de las actividades de ocio, los mayores les acompañaban o bien tenían ocasion de probar las variadas tapas, que Junta Central había preparado para degustar durante la mañana.
Sería alrededor de las 14:00 h cuando al llegar los bomberos, la atención se centraba en torno al monumento. Se sucedían las fotografías de las Falleras Mayores, de los niños y sus padres con los ninots hechos en los colegios. Era la última visita que les hacían, su despedida emotiva antes de verlos arder entre las llamas. Con esto las fallas pasaban el Ecuador del medio año y los coles cerraban su participación masiva en la fiesta de 2015, tras haber cumplido una vez más con su labor formativa.
Juan Vera Gil
Cronista Oficial fallas de Elda
Marzo 2015