El Área de Feminismos de Esquerra Unida celebra por sexto año consecutivo el Día Internacional de la Mujer Trabajadora (8 de marzo) con un programa de actividades con el que se pretende seguir en la lucha por la igualdad efectiva entre hombres y mujeres.
La primera de ellas tendrá lugar el viernes, 6 de marzo, a las siete de la tarde en el Horno Cultural con la inauguración de la exposición «Maestras del pincel». Desde el colectivo de EU indican que el principal objetivo que se persigue con esta muestra es «poner en valor el trabajo de las mujeres dentro del mundo del arte»: Se centra concretamente en mujeres que desarrollaron su carrera artística como pintoras, haciendo del arte su profesión. E un amplio recorrido por la pintura del siglo XIX teniendo a la mujer como protagonista». El acto contará con la presentación de María Herrero y la doctora en Filosofía Silvia Ferri comentará la exposición.
El sábado, 7 de marzo, también en el Horno Cultural, se celebra el taller «Pactos de mujeres», dirigido por Pura Díaz, quien proporcionará pautas para aprender entre mujeres y enseñar a otras: «pactos para avanzar en nuestras reivindicaciones, en igualdad, libertad, paz, solidaridad y justicia de género», señalan.
El 8 de marzo, el Área de Feminismos de EU se concentrará a las 20:00 horas en la Plaza de España, donde leerán un manifiesto de reivindicación de los derechos femeninos. La convocatoria está abierta a la participación de otros colectivos así como de todos los ciudadanos.
El último acto previsto dentro del programa se traslada al domingo,22 de marzo, con una charla/debate sobre el género en la Constitución de 1978. Además, se clausurará la exposición. Será a las 12:00 horas en el Horno Cultural.
Desde el Área de Feminismos de EU han analizado la actual situación de la mujer en España: «Nos encontramos en un contexto de continua vulneración de los derechos adquiridos por mujeres y de empeoramiento de sus condiciones de vida. Prueba de ello es la feminización de la pobreza debido a los recortes sociales (dependencia, igualdad, sanidad, políticas migratorias…), los nuevos retoques respecto al derecho a decidir sobre nuestro propio cuerpo con la reforma de la ley del aborto, o la agudización en el mundo laboral de efectos estructurales del sistema capitalista como la división sexual del trabajo, el techo de cristal, la brecha salarial, o la criminalización de la prostitución».
Desde EU consideran que la Administración Pública debe estar al servicio de la ciudadanía y salvaguardar sus derechos: «Por ello es imprescindible que las administraciones públicas promuevan la igualdad efectiva y real entre hombres y mujeres y se eliminen los obstáculos roles y estereotipos sociales que impiden a las mujeres desarrollarnos libremente sin tener como referencia lo masculino. De la misma manera es necesario el reparto equilibrado del trabajo remunerado y no remunerado entre hombres y mujeres, y para esto las administraciones públicas deben responsabilizarse del mantenimiento de los servicios públicos gratuitos y de calidad. Es muy importante la implicación sin paliativos de las administraciones públicas en la lucha contra la violencia machista. Y del mismo modo es fundamental que se garantice la libertad de decidir sobre nuestro propio cuerpo».