El Partido Popular y los generadores de opinión del establihsment están realizando un gran esfuerzo para contrarrestar la cada vez mayor desafección de la ciudadanía ante sus políticas antisociales. Hace unas semanas, la PAH de Elda y Petrer fue invitada a una tertulia en la que, en principio, se expondría el trabajo que se está realizando a nivel local, y la opinión que nos merece el proyecto de ley o «hipotecazo» que será aprobado en el congreso y que ya ha sido dictaminado en la comisión del parlamento con 21 votos a favor, los del PP, y 20 en contra. Esta aprobación tumbará la Iniciativa Legislativa Popular que la Plataforma de afectados por la hipoteca junto con otras entidades sociales y sindicales impulsaron recibiendo el apoyo de alrededor de un millón y medio de firmas. Más del triple del mínimo de firmas requeridas para poder iniciar el proceso debate y aprobación de la ILP en el congreso. Tal fue la sorpresa de los y la compañeras al constatar que no se trataba de una tertulia sino de un debate muy bien orquestado por los invitados que defendían las propuestas del PP. Aún así, por muy bien que prepararan el debate y tras muchas excusas que pusieron y con todos los argumentos que utilizaron para desviar la atención y crear una cortina de humo, no engañaron a nadie.
Lo que se ha aprobado es una burla a la inteligencia de la ciudadanía que ya no cuela. La ley no contempla la dación en pago retroactiva, única salida que le queda a una familia para poder rehacer su vida. Y cuando se dice única, es así, pues ya se han valorado todas las posibilidades y alternativas y no existe otra solución que perder la vivienda para poder saldar una deuda eterna que le empujaría a la marginación y la exclusión social. No vale que el PP diga, que la ley garantizará que todos tenga la oportunidad de renegociar con el banco. ¡Que desapegados de la realidad de las personas a las que gobierna!. Eso ya se está haciendo desde antes del 2009 directamente con los bancos y las familias saben perfectamente porque lo están sufriendo en sus carnes, que estas renegociaciones, refinanciaciones, o novaciones con carencias sólo sirven para endeudarse aún más si cabe. No tenemos que perder de vista que el paro se sitúa ya por encima del 27% de la población activa, unos 6.202.700 desempleados y la reforma laboral, como era de esperar, ha sido un estrepitoso fracaso.
El proyecto de Ley es un intento acrobático de legislar sin dañar las líneas de flotación de la injusta, ilegal y arcaica Ley Hipotecaria. Realiza una revoltijo de hasta seis normativas y modifica el código de buenas prácticas. Pero sigue sin dar solución a la emergencia habitacional en la que nos encontramos, al no contemplar la regulación de un parque público de viviendas en alquiler. Es cierto que la ley realiza algunas pequeñas concesiones, como subir el umbral de incluidos para paralizar desahucios o facilitar tibios recursos a los abogados y jueces para buscar clausulas abusivas. Pero no como imperativo legal, solamente cuando el deudor lo solicite. Por tanto sigue sin reconocer, como dictaminó el Tribunal de Justicia Europeo, que se vulnera sistemáticamente la legislación europea y derechos universales y constitucionales.
Tras el fracaso de la criminalización del movimiento, la nueva estrategia es confundir su «proyecto de ley», que no se acerca ni por casualidad a una posible nueva ley de 2º oportunidad, con la ILP . Es por este motivo que la PAH ha decidido retirar la ILP, ya que lo que se va a ratificar en el senado en breve no tiene nada que ver con la propuesta que nace de las familias afectadas.
El Partido Popular sabe perfectamente que este «hipotecazo» no va a frenar la sangría de desahucios y de deudas impagables, en todo caso se aplazarán algunos desahucios durante un tiempo pero las deudas aumentarán y los desahucios volverán con mayor intensidad. Descuida por tanto una función esencial del gobierno que es velar y garantizar el «estado de derecho» protegiendo a la ciudadanía y legislando a favor de la mayoría. Están diseñando un estado residual coercitivo y punitivo donde derechos constitucionales se relegan a un acto de caridad individual y privada. Esta es la manera de entender la democracia que tiene Partido Popular: .
Mientras el PP y PSOE continúan en una espiral de pérdida de intención de votos que se confirma encuesta tras encuesta, concretamente el PP ha caído en 10,8 puntos respecto al año 2012 y perdería la mayoría absoluta y hasta el gobierno y el PSOE seguiría sin remontar, la PAH y sus iniciativas tienen el apoyo social de más del 80% de la población del Estado Español. Esto es un botón de muestra de la deslegitimación creciente que están sufriendo estos dos partidos políticos y lo que representan. A la ciudadanía afectada por las hipotecas, por los recortes en educación, sanidad, servicios sociales y por la reforma laboral, ya no se le engaña tan fácilmente y no van a perdonar a esta casta de políticos profesionales que les dan la espalda y defienden los intereses de los más poderosos. Este modelo tiene fecha de caducidad.
Por Sergi Cremades, miembro de la Plataforma de Afectados por los Desahucios Elda/Petrer