Los datos de desempleo de noviembre arrojan otro mes negro en el conjunto del país, a excepción de la Comunidad Valenciana, única comunidad que desciende en sus números (-3101). En la comarca del Medio Vinalopó, el paro ha descendido en 408 trabajadores respecto al mes de octubre, quedando la cifra total de desempleados de 25894. En el mismo mes del año anterior, el 2011, el paro bajó en 186 trabajadores.

El paro ha bajado, por orden de importancia, en Petrer (108 parado menos), seguido de Elda  (93), Novelda  (84), Aspe (80), Monóvar (36), La Romana (24), Hondón de las Nieves (3) y Monforte del Cid (1). Ha subido en Pinoso y Algueña con 10 más y Hondón de los Frailes con 1 más.

Los buenos datos son, por tanto, que el paro ha bajado en noviembre más del doble que el año pasado, en un mes en el que además la provincia de Alicante, en general, no siguió la buena tónica de la Comunidad Valenciana y sumó 2.421 trabajadores a la lista de desempleados. El paro ha descendido, además, en 8 de los 11 municipios de la comarca. La disminución del desempleo tiene que ver con el buen comportamiento del sector agrícola así como del sector industrial, debido al repunte de las exportaciones del calzado.

Los datos de la EPA: uno de cada tres trabajadores está en el paro

Estos datos, no obstante, han sido  considerados por los sindicatos como «una gota en un vaso de agua y una tregua en la constante subida del paro que acabará el año con cifras récord». No van desencaminados, el último informe del tercer trimestre del IVE (Instituto Valenciano de Estadística) recoge unos datos alarmantes de la EPA (Encuesta de Población Activa): uno de cada tres trabajadores potenciales está en paro en nuestra comarca. El dato, 32’52%, es el más alto de la Comunidad Valenciana y revela un crecimiento de más de un punto por trimestre (más de 4 puntos en lo que llevamos de año, desde el inicial 28’5%).

Desde UGT de la Muntanya-Valle del Vinalopó reflexionan sobre estas cifras: «no se puede luchar contra el desempleo recortando, recortando y recortando ya que esto solo trae más desempleo y más precariedad laboral y es que las políticas de recorte si no van acompañadas de estímulos al crecimiento, no cumplen ni con los objetivos para lo que se implantan, la reducción del déficit. Si a esto unimos la disminución del gasto disponible en las prestaciones por desempleo y en las políticas activas de empleo, que el gobierno ha reflejado en su proyecto de presupuestos generales del estado para el año 2013, tenemos una sociedad más injusta e insolidaria y la destrucción a corto plazo del Estado de Bienestar».