Con ocasión del Día Mundial contra la Pena de Muerte, este año Amnistía Internacional (AI) quiere recordar que la pena de muerte es la forma más extrema de tortura, y quiere poner de relieve los vínculos entre la pena de muerte y el uso de los malos tratos y la tortura, prohibidos por las normas internacionales de derechos humanos y el derecho internacional humanitario.
Algo que se reflejan en el caso del japonés Hakadama Iwao, que lleva 43 años esperando a ser ejecutado en Japón. También los activistas de la organización en todo el mundo trabajarán para impulsar el fin de la pena de muerte en Bielorrusia, el único país europeo que todavía lleva a cabo ejecuciones, las dos últimas este año.
Amnistía Internacional registra habitualmente casos de personas condenadas a muerte o ejecutadas tras haber sido declaradas culpables sobre la base de “confesiones” obtenidas bajo tortura o coacción en países como Arabia Saudí, China, Emiratos Árabes Unidos, Guinea Ecuatorial, Irán, Japón, Sudán, Taiwan y Yemen.
Al final de 2010 había al menos 17.800 personas condenadas a muerte en el mundo, a la espera que los gobiernos las mataran.
La pena de muerte es la forma más extrema de pena cruel, inhumana y degradante. La falta de humanidad de su aplicación se pone de manifiesto en casos de todo el mundo. Los condenados describen sus terribles condiciones de vida en la prisión, la angustia de estar esperando su ejecución, en muchos casos por haber “confesado” bajo tortura un delito que aseguran no haber cometido.
Cuando se fundó Amnistía Internacional en 1961, sólo nueve países habían abolido la pena de muerte para todos los delitos y apenas se consideraba la pena capital una cuestión de derechos humanos. Cincuenta años después, la tendencia mundial a la abolición de la pena de muerte es imparable, y la lucha continúa.
Centenares de activistas de Amnistía Internacional van a celebrar actos públicos para manifestarse en contra de la pena de muerte en más de una decena de países de todo el mundo, incluidos Paraguay, Malaisia, Francia, Reino Unido, Hong Kong, Grecia, Italia, Puerto Rico, Ucrania, Mongolia, y España, donde desde el 10 de octubre hasta el 30 de noviembre, coincidiendo con el día de activismo internacional Ciudades por la vida, se realizarán diferentes actos en diversas ciudades españolas.
El grupo de Elda-Petrer de Amnistía Internacional os invita a participar en la ciberacción sobre pena de muerte que podéis encontrar en http://www.es.amnesty.org/temas/pena-de-muerte/acciones/