Después de un mes repleto de carreras, y tras la suspensión del Trofeo Iguanzo en Cantabria y Guerrita en Murcia por temas burocráticos, el equipo local de ciclismo Wolfbike-Metal Lube Élite Sub-23 da por completada la Copa de España. «El final ha sido frenético», explican desde el equipo, «pues entre vuelta a Villareal y Cuéllar llegamos a partir en tres nuestra plantilla para organizarla por toda España».
Desde la prueba en Torredonjimeno (Jaén), donde desde el comienzo entramos en fuga, controlando el pelotón y anulando lo que no nos interesaba, la fortuna parece que nos dio la espalda, con Luis Devesa con una fuerte gripe, Siguro con conjuntivitis y Eusebio Pascual rompiendo la bici en Legazpi, al igual que Carlos Martín sufriría una fuerte caída en el adoquín del Memorial Pascual Montparlre», rememora su director deportivo, Andrés Antón, de lo que ha sido la temporada del equipo hasta ahora. «El más combativo de la copa ha sido sin duda Andreu Mas, ciclista de Parcent, y el más fuerte Inaki Gonzálvez, de Alcoy, que en todo momento siempre estuvo entre los diez mejores». Por todos estos apuntes positivos, Antón valora el desempeño en la copa nacional como «bueno, de ahí el buen resultado por equipos, a pesar de tener cinco ciclistas de primer año».
El equipo vivirá a partir de ahora la segunda parte de la temporada, con las grandes clásicas y las Vueltas de Segovia, Castellón, León y Valencia. Igualmente, el equipo disputará un par de de pruebas en Portugal junto a profesionales. «Felicitar desde aquí a la combativa plantilla», anima Antón a los suyos, a vistas de una temporada de primavera/verano llena de desafíos. Las siguientes carreras, el 10 de mayo en Alcoy el 17 de mayo en Vinaroz.