El impacto de la tecnología en la actualidad es impresionante y alentador.

Muchos son los sectores que hoy en día se están beneficiando de desarrollos tecnológicos avanzados, hasta el punto que nuestra sociedad está cambiando más rápido que cualquier otra en la historia de la humanidad. En áreas como en la de salud, este año se ha conseguido incluso rejuvenecer al ser humano,  y todos conocemos como se ha revolucionado el sector del entretenimiento, por ejemplo con la gran inmersión que ha traído el mundo de la apuesta deportiva en tiempo real, y donde por cierto se ofertan bonos tan increíbles como el  Código Promocional Wplay , que hacen del evento deportivo una experiencia más intensa.

Por supuesto, las tecnologías verdes y desarrollos tecnológicos en general también tienen un gran impacto en el ambiente y en el planeta Tierra. Y es por eso, que hoy, en un mundo de incertidumbre y cambio climático, hemos querido mostrar la cara positiva y reseñar algunas tecnologías que podrían ayudarnos a preservar y tener un mejor planeta.

Aquí 4 de las tecnologías que podrían ayudarnos a salvar nuestra Tierra.

Vidrio solar

¿Qué pasaría si cada ventana en un rascacielos pudiera generar energía? Esa es la promesa del vidrio solar, una tecnología emergente que está recibiendo mucha atención en los círculos de diseño y sostenibilidad. Tal como suena, el vidrio solar es un material de ventana transparente, pero también captura la energía del sol y la convierte en electricidad.

El gran obstáculo ha sido la eficiencia. Las células solares de alto rendimiento pueden alcanzar un 25% de eficiencia o más, pero mantener la transparencia significa sacrificar la eficiencia con la que la luz se convierte en electricidad. Pero, un equipo de la Universidad de Michigan está desarrollando un producto de vidrio solar que ofrece un 15% de eficiencia y escalada al tiempo que deja pasar un 50% de la luz. Según las proyecciones, existen de 5 a 7 mil millones de metros cuadrados de espacio de ventana utilizable, suficiente para alimentar un 40% de las necesidades energéticas de los Estados Unidos con un producto de vidrio solar. Esto genera esperanza global ya que si se implementa a nivel general, el daño al medio ambiente también se reducirá notablemente.

 

Grafeno

Más fuerte que el acero, más delgado que el papel, más conductor que el cobre, el grafeno es verdaderamente un material milagroso, y hasta hace poco, completamente teórico. El grafeno es una capa ultrafina de grafito que se descubrió por primera vez en 2004 en la Universidad de Manchester. Ahora es objeto de una intensa investigación y especulación, y muchos predicen que será el siguiente en la línea después del bronce, el hierro, el acero y el silicio para promulgar la evolución cultural y tecnológica de nuestra especie.

El grafeno, de un solo átomo de espesor, es flexible, transparente y altamente conductor, lo que lo hace adecuado para una amplia gama de aplicaciones. Estas incluyen filtración de agua, superconductores capaces de transferir energía a través de grandes distancias con una pérdida mínima, y ​​usos fotovoltaicos, por nombrar algunos de los beneficios con impacto positivo en nuestro medio ambiente. Al aumentar enormemente la eficiencia sobre los materiales actuales, el grafeno puede ser la piedra angular de nuestro renacimiento verde.

Plástico a base de plantas

Tenemos que poner fin a los plásticos de un solo uso. Ya se están iniciando iniciativas en todo el mundo para prohibir o limitar severamente su uso. Lamentablemente, el problema está profundamente arraigado en nuestra economía de consumo.

Los plásticos a base de plantas que se biodegradan son una solución viable y efectiva, ya que, en teoría, podrían reemplazar muchos de los productos plásticos que ya están en circulación. Una empresa indonesia llamada Avani Eco ha estado fabricando bioplástico con yuca desde el 2014. Al igual que la carne falsa y el vidrio solar, este debería convertirse en un sector en auge en los próximos años. Pero cuidado: no todos los bioplásticos se biodegradan, y se debate el mérito de algunas técnicas de producción. Parte de convertirse en un consumidor responsable en la próxima década será conocer el ciclo de vida de los productos que elegimos comprar, desde la creación hasta la entropía.

 

Inteligencia artificial

El programa AI for Earth de Microsoft, basado en la inteligencia artificial (IA), es un esfuerzo en marcha para aprovechar el potencial de la inteligencia para el bien del planeta. El programa ha otorgado más de 200 becas de investigación a equipos que aplican tecnologías de IA a la salud planetaria en una de cuatro áreas: biodiversidad, clima, agua y agricultura. La IA primitiva y los algoritmos de aprendizaje automático están analizando actualmente superficies heladas para medir los cambios a lo largo del tiempo, ayudando a los investigadores a plantar nuevos bosques con diseños precisos para maximizar el secuestro de carbono y habilitando sistemas de advertencia para ayudar a detener la proliferación de algas destructivas.

La IA está teniendo un impacto en las prácticas agrícolas y pronto transformará la forma en que se realiza la agricultura en las naciones industrializadas, reduciendo nuestra dependencia de los pesticidas y reduciendo drásticamente el consumo de agua. La IA hará que los vehículos autónomos naveguen más eficientemente, reduciendo la contaminación del aire. Los científicos de los materiales están desplegando IA para desarrollar reemplazos biodegradables para los plásticos y desarrollar estrategias para limpiar nuestros océanos, que reciben anualmente alrededor de ocho millones de toneladas métricas de plásticos.

Estas 4 tecnologías prometedoras son solo algunas de las tecnologías que nos pueden ayudar a preservar el medio ambiente y tener un planeta habitable por mucho tiempo más.