El año del paro

El 2009 ha sido económicamente uno de los años más duros que se recuerdan, algo que ha sido evidente en el día a día y que ahora en este primer mes de 2010 se evidencia en cualquiera de los balances laboral y monetario que diversas instancias y entidades están llevando a cabo. Para una de estas entidades, el sindicato de UGT-Muntanya Valle del Vinalopó,  la rampante cifra de paro es el principal motivo de preocupación, con un ascenso en 2.009 de 6.913 parados en la comarca, cerrando el año con una cifra histórica: 29.831 parados en total. El registro de parados anuales apenas ha tenido un ligero descenso respecto al nefasto dato de 2008 (en el que se quedaron sin empleo 7.601 trabajadores), con lo que la crisis se ha vuelto a cebar en la destrucción de empleo, siendo, en palabras del sindicato, “años para olvidar”.

El pueblo en que más ha subido el paro ha sido el de Elda, con 1.465 parados más (en 2008 subió en 1.892); seguido de Villena con 1.122 parados más, (en 2008, 1012); Petrer, con 1.024 parados más (en 2008, 1.322); Novelda con 932 parados más (en 2008, 876); Aspe con 706 (en 2008, 746) y Monóvar con 462 parados más (en 2008, 495). En el 2009 el paro sólo bajó en Campo de Mirra, y en una persona.

El paro femenino y masculino ha subido de forma similar, 3.482 mujeres por 3.431 hombres. Desde UGT explican que “es debido a que en el mercado de trabajo hay más hombres en activo y que uno de los sectores más castigados es el de la construcción”. Por ello, para el sindicato, “en este apartado nuestro reto debe de ser seguir luchando por la igualdad efectiva entre hombres y mujeres y erradicar todos los indicadores negativos que tienen respecto a los hombres: menor salario, más precariedad laboral, menores tasas de actividad, menor protección social, etc”. Por sectores, el más castigado ha sido la Industria (con 11.918 parados más)  y Servicios (con 10.142), seguido de construcción.

Diciembre 2008 Diciembre 2009 Diferencia
Agricultura

679

1.034

355

Industria

9.896

11.918

2.022

Construcción

2.841

4.066

1.225

Servicios

7.804

10.142

2.338

Sin Empleo Anterior

1.698

2.671

973

TOTAL

22.918

29.831

6.913

Los datos de contratación desvelan que, durante el año 2009 se han realizado, en nuestra comarca, 36.864 contratos de trabajo, 12.129 menos que en el año 2008. De los 36.864 contratos el 14,62% han sido fijos, un punto y medio menos que en el 2008. El 55,35% de la contratación ha sido para hombres, mientras que el 44,65 % para mujeres.  Por sectores, han bajado los contratos en Industria y Construcción y han subido en los Servicios y en Agricultura, haciendo patente para UGT “la constante pérdida de peso del sector Industrial en la economía comarcal”.

Ha sido el pasado un año de repetir “vicios clásicos de nuestra comarca como son el clandestinaje, la economía sumergida y el cubrir puestos de trabajo fijos con contratos temporales. Se ha mantenido la temporalidad, amparada en ese vicio de nuestros empresarios de encadenar sucesivos contratos temporales”. En su análisis, UGT insiste en demandar “mayor y mejor formación y cualificación de los trabajadores/as, ya que son los requisitos imprescindibles para aumentar la productividad del trabajo”.

E.R.E.s y seguridad laboral

Los temidos Expedientes de Regulación de Empleo (E.R.E.s) han tenido mucha presencia en 2009, con un total de 263, que afectaron a 2.634 trabajadores. Las localidades más afectadas fueron Elda con 82 Expedientes, Petrer con 36 y Villena con 24. En cuanto a los sectores más afectados, 80 fueron del Calzado o empresa auxiliar, 53 de la Construcción o Mármol, 33 del Metal y 24 de Madera y Muebles.

Los datos respecto al 2008 (en los que 142 empresas realizaron E.R.E.s que afectaron a 1.493 trabajadores) muestran un considerable aumento, que para UGT viene dado “por el uso abusivo que se está haciendo de ellos; muchos lo único que persiguen es aprovechar la crisis para ajustar sus plantillas, sin tener una justificación desde un punto de vista económico y productivo”. Denuncian que  “hay empresarios/ as que se aprovechan de la crisis para regular las plantillas de sus empresas por medio de los E.R.E.s ya que es más barato despedir así” y exigen un mayor control y vigilancia para su aprobación, “acompañándolo además por proyectos industriales y planes de viabilidad de futuro”.

Pero sin duda, uno de los aspectos en que más crítico se muestra el sindicato es en de la seguridad y salud laboral, sobre el que “seguimos sin tener conocimiento de la evolución de los accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, gracias, una vez más, a la evidente estrategia ocultista y de manipulación de los datos estadísticos de siniestralidad laboral ejercida desde el Gobierno Autonómico Valenciano. No es aceptable que en sectores de alto riesgo, como la construcción, se sigan manteniendo las mismas tasas de siniestralidad laboral con un menor número de trabajadores”. UGT promete  seguir trabajando “para asentar la cultura de la prevención y hacer cumplir íntegramente la Ley de Prevención de Riesgos Laborales”.

Para finalizar, desde UGT reivindican “el cambio del modelo productivo, un modelo productivo obsoleto y basado en mano de obra barata, precaria y poco formada. Tenemos que basar, el nuevo modelo productivo, en la educación para mejorar la cualificación profesional, en la Innovación el desarrollo y la política tecnológica, en una nueva política industrial y en una política energética y medioambiental que apueste por el desarrollo sostenible”. UGT  apuesta por la industria como motor de desarrollo “hay que recuperar el papel preponderante de la industria como sector generador de riqueza ya que las actividades industriales contribuyen al crecimiento económico y a la creación de bienestar”. También abogan por el crecimiento moderado de los salarios, en función de la situación de las distintas empresas o sectores, en la negociación colectiva del 2010, así como el establecimiento de un salario mínimo convenio para contribuir a restablecer la demanda y evitar la caída del consumo y de la actividad económica, ya que esto provocaría una mayor destrucción de empleo”.

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