Los vigilantes de seguridad del Hospital Virgen de la Salud de Elda, así como los del Centro de Especialidades de Villena, ambos pertenecientes a la empresa de vigilancia Esabe, reclaman el pago de la nómina de julio más la paga extraordinaria, un pago que todavía se le debe al 75% de la plantilla de ambos centros. Los trabajadores, reunidos ayer en una asamblea convocada por el comité de empresa, no descartaban llevar a cabo medidas de presión para contrarrestar con una situación que, según manifiestan, les ha llevado a estar “con el agua al cuello” y le ha generado más de un “drama doméstico”.
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A los trabajadores, de los que algunos llevan 20 años trabajando en el mismo puesto, se les adeuda una media de 2.000 euros por cada uno, y algunos han tenido que renunciar a las esperadas vacaciones. Lejos de ser un problema puntual, los retrasos comenzaron a producirse hace meses. “En enero ya no se nos aplicó la subida pactada por el IPC y desde febrero no se están pagando las horas extraordinarias, que sin embargo se siguen teniendo que hacer, y lo último es que ya que ni se nos ha abonado la paga extra de julio ni la nómina del mes, con lo que la situación es ya insostenible», relataban fuentes del comité de empresa al diario provincial Información.
Además los trabajadores temen que el problema se agudice ante las noticias que llegan de otros centros, como el Hospital la Fe de Valencia, donde el personal de limpieza, también de la misma empresa, está sufriendo los mismos problemas con el pago de sus nóminas.
El Hospital informa que sus pagos a la empresa de Vigilancia están al día
Fuentes del Hospital de Elda aseguran que conocen de primera mano la situación actual con los vigilantes del centro y aseguran que el origen del problema no está en la Administración pública, y que no están pensando en restringir en contrato que tiene con la empresa de vigilancia, algo que sí planteaban los propios trabajadores.
En lo que si están trabajando desde el centro sanitario es en mediar para que Esabe efectúe lo antes posible los pagos de las nóminas pendientes para no agravar más la situación. Lo cierto es que los vigilantes siguen planteando medidas de presión y han manifestado que si no cobran “ya”, dejarán de cubrir las horas extraordinarias que dejaron de percibir desde el pasado febrero.