En mayo, un hecho insólito, la indisposición del 80% de la plantilla policial local del turno ordinario, provocaba el desplazamiento del alcalde, el concejal de sanidad y el intendente jefe a las casas de cada uno de estos agentes que no se encontraban en condiciones de acudir a su puesto de trabajo. Este suceso, con muchas posibles lecturas, acabó pasando al imaginario colectivo como una vuelta de tuerca más en el tira y afloja entre la plantilla policial, los sindicatos que los agrupan y el ayuntamiento. Por esta publicación, tratando de explicar todas las posturas, pasaron Francisco José Rubi [1]o, representante del SEP, Enrique Ramírez, representante del SPPLB, [2] que agrupa a la mayoría de efectivos de la plantilla, y Óscar Payá, el concejal del área policial [3]. Escuchamos, entonces, las denuncias de los sindicatos, que se centraban en la falta de medios materiales y en la inacción y el inmovilismo del consistorio en las negociaciones que periódicamente tenían, mientras el concejal defendía su postura y hacía recuento de cuantas mejoras materiales y personales se habían realizado en los últimos años, que consideró más que suficientes. Por parte de todos, eso sí, voluntad de negociar, tranquilizar los ánimos y alcanzar una solución sin presiones ni enfrentamientos.
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Meses después, parece que la buena voluntad y la predisposición para alcanzar acuerdos se han quedado por el camino. A lo largo de este año van ya 14 agentes y un comisario de la Policía Local de Petrer los que han solicitado, mediante concurso de movilidad, su traslado a otras ciudades, concretamente a Elche y a Alicante. Las denuncias de los agentes siguen siendo las mismas, la falta de medios y la dejadez de la corporación para solucionar este tema del que llevan meses señalando su “urgencia”, pero la táctica ha cambiado y, para muchos, lo mejor es ahora abandonar el barco. Muchas peticiones de movilidad están pendientes de aprobación, y para todas aquellas que finalmente la obtengan, el concejal de Policía, Óscar Payá, ya ha manifestado que serán cubiertas en su totalidad, manteniendo el número de efectivos de la plantilla. El concejal ha reconocido que mantienen un largo enfrentamiento con los sindicatos, pero que el consistorio está cumpliendo sus promesas en la compra de material y que ya “no es tiempo de hacer demagogia, que demuestren esa carencia”. Además, ha querido señalar “que la movilidad es algo corriente también en otros municipios, que se van a poblaciones más grandes donde cobran más”. No obstante, en los últimos 20 años, Petrer ha sido una de las poblaciones de la Comunidad Valenciana cuya la plantilla local de policías ha solicitado en mayor número, mediante concursos de movilidad, el traslado a cuerpos de otras localidades.