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* Imágenes de Javier Muñoz y Maysu Ene
Además de las típicas escenas alegres, la gran nevada de ayer [2]dejó imágenes inquietantes. En Catí, concretamente, se vivieron escenas de auténtico caos y miedo, cuando los vecinos intentaron regresar a sus casas. Bien pronto se convirtió en una misión imposible: a las dos de la tarde, la subida del Pantanet al hotel ya era impracticable, por la gruesa capa de hielo que lo cubría y porque los primeros coches en intentar bajar se quedaron cruzados. Así, la situación se tornó en una cadena de accidentes desastrosa que dejó fuera de juego a una veintena de vehículos: uno despeñado por el barranco, otros estampados contra pinos y muros, otros tantos cruzados, los más en la cuneta. La buena noticia es que, hasta ahora, no se reportan daños personales. El coche despeñado por el barranco era propiedad de una vecina que se encontraba fuera de él cuando ocurrió el siniestro.
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Ante esta situación, unos 90 vecinos se vieron obligados a pasar la noche en el hotel -algunos metidos en sus coches-, y una treintena todavía permanecen retenidos en él. Muchos otros han optado esta mañana por bajar andando a la localidad. Ya ayer por la tarde la Guardia Civil dio órdenes de que ningún coche intentara bajar, y la orden se mantiene a estas horas. La ayuda, según los testimonios recogidos, ha sido bastante caótica. Dos camiones del 112, con la misión de revolcar a los coches cruzados, se han quedado a medio camino, no pudiendo subir por las placas de hielo. Testigos presenciales nos han dicho que un camión de bomberos también ha debido dar la vuelta, aunque este extremo no lo podemos confirmar.
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La Guardia Civil ha cortado el acceso a la zona a la altura del Molino de la Reja y se han quedado de guardia para que no se repitan las escenas de ayer, en el que los vecinos, simplemente, ignoraron y bordearon las vallas. Igualmente, al haber varios bebés entre las 90 personas atrapadas en el hotel, la Guardia Civil ha subido esta mañana con leche y pañales, además de distribuir mantas por la noche, en previsión de no poder restaurar la normalidad de la circulación. Compañeros de emergencias nos informan también que está prevista la subida de dos quitanieves al paraje, uno por Castalla y otro por Petrer, e igualmente desde el Ayuntamiento están contemplando llevar un camión con sal para ayudar en la situación.
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