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Hace tiempo que en la publicación no mostramos a los arruís. Su presencia es tan habitual -y numerosa- en nuestros parajes que ha dejado de ser noticia, aunque siempre es un placer para el observador poder verlos. Y para verlos de verdad en su vida diaria, en sus ritmos, comportamientos y dinámicas, ningún lugar como nuestros puestos de observación alrededor de charcas, donde se sienten protegidos y, simplemente, viven…